EL SONIDO
 DEL AGUA
Augacaída: una ventana al inicio de la vida
Los helechos fueron los dueños de la tierra en el origen de la vida, y vieron nacer a los dinosaurios y al hombre…
Un millón de años después, siguen trasladándonos al paisaje de la prehistoria

Augacaída se oculta en un hogar natural de castaños, robles y alcornoques abrazados por un excepcional manto de helechos. Plantas, en apariencia frágiles, que han sobrevivido durante 400 millones de años superando todas las extinciones masivas que ha conocido la Tierra.

 

LA LEYENDA:
Como ejemplo máximo de supervivencia, el helecho, hijo de las sombras y la humedad, se ha alimentado de magia y ha nutrido leyendas en toda Europa. Hay hechizos para el amor, la fortuna, la salud, la juventud eterna, y, sobre todo, para la invisibilidad. En España, las celestinas daban la planta a las parejas de enamorados para que no fueran descubiertos; y los druidas mezclaban sus ramas con las del avellano con el mismo propósito.
Para Deva, la Diosa Celta del amor, el helecho era su planta favorita; y, en la Edad Media, las hojas, también se usaban como protección para alejar al demonio.

En su obra “Botánica Oculta”, Paracelso habla del Helecho Macho como símbolo de la humildad… que "destruye las pesadillas, aleja el rayo y actúa contra los hechizos”. No fue el único.
Desde William Shakespeare a Hildegarda de Bingen, abadesa, bióloga y santa alemana, una lista interminable de autores se han referido en sus obras al poder mágico de esta planta.
“Como la luz del sol es a los lugares oscuros, así el helecho persigue las malas visiones, y desprecia a los espíritus malignos. En el lugar donde crece, el diablo raramente practica sus engaños… La savia del helecho se ha puesto para contener la sabiduría, y en su naturaleza honesta, se encuentran la bondad y la santidad. Todas las cosas del mal y de la magia lo huyen y lo evitan” (Hildegarda de Bingen, siglo XII)

No es la cascada más alta de Galicia, pero sí la más impresionante con su lengua de agua de cuarenta metros cayendo sobre una piscina natural, entre rocas primitivas y bosques de cuento, donde confluyen el clima atlántico con el Mediterráneo continental.

Quinta Sacra accede a Augacaída desde el río (en lancha) por un camino arcaico que se va abriendo, entre los árboles y el rugir del agua, hacia este escenario insólito de la naturaleza. Sin duda, uno de los secretos mejor guardados del río Miño. 

 A FERVENZA
 DE AUGACAIDA

a Fervenza de Augacaída (Marce, PantÓn) es uno de los espacios mÁs espectaculares del corazÓn de la Ribeira por su increíble paisaje, su historia, su misterio y sus leyendas de xacias y hombres pez.

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